- ✓ Mejorar el programa de estudios
- ✓ Un sinfín de posibilidades para los estudiantes
- ✓ Educación a prueba de futuro
Entender y usar esta creciente tecnología puede beneficiar el aprendizaje de los niños. Particularmente en las asignaturas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM). Pero también más allá de estos campos más tradicionales, por ejemplo en tecnología del diseño, biología, historia y geografía. Las ventajas son el aumento de la motivación de los alumnos cuando participan en proyectos de impresión en 3D y la capacidad de aprender a través del ensayo y el error. Tiene un «factor sorpresa» que puede atraer a estudiantes que de otra manera no se habrían interesado en la asignatura escolar.
El creciente número de impresoras 3D en la educación no se debe sólo al creciente reconocimiento de la impresión en 3D, sino más bien a que se trata de un instrumento educativo pertinente y atractivo. Por supuesto, también se relaciona con el número y la disponibilidad de impresoras 3D de bajo costo. Actualmente, las escuelas pueden comprar una impresora 3D asequible. Además de los precios, los recursos disponibles para los maestros y otros profesionales de la educación también hacen que la impresión en 3D sea más accesible. Los profesores pueden ahora descargar programas de diseño y acceder a ellos a través de tabletas y teléfonos móviles. También hay disponibles bases de datos en línea con diseños imprimibles en 3D gratuitos, por ejemplo Thingiverse. Hay disponibles sencillos tutoriales para principiantes para aquellos sin conocimientos básicos de la tecnología. El uso de la impresión 3D en el aula permitirá a los estudiantes formar parte de la creciente comunidad dedicada a la impresión 3D.
La tecnología de impresión 3D beneficia a la educación ya que posiciona a los estudiantes como creadores. En lugar de comprar o consumir las creaciones de otra persona, se convierten en los inventores. La impresión 3D es una tecnología que los científicos e ingenieros están usando para cambiar el mundo. Ponga esa misma tecnología en manos de sus estudiantes y presénteles algunos de los desafíos que enfrenta su comunidad. Con la impresión 3D en la educación, aprenderán empatía, trabajo en equipo y resolución de problemas a medida que los libera de un problema del mundo real. No se sorprenda si encuentran soluciones que usted ni siquiera había imaginado. Con las herramientas, los recursos y el apoyo adecuados, piensa en todos los objetos innovadores que los estudiantes pueden crear.
El uso de la impresión 3D en la educación como método de producción permite a los estudiantes y alumnos pasar de la concepción de una idea a la producción de un objeto físico con relativa facilidad. La tecnología proporciona la capacidad de producir una pieza rápidamente, lo cual es una ventaja para los estudiantes que aprenden sobre diseño, en particular las limitaciones y restricciones de las diferentes tecnologías. Investigar un objeto físico puede facilitar a los alumnos la detección de errores en los diseños. Esto les permite adquirir valiosas aptitudes para resolver problemas de manera creativa y práctica; sin la capacidad de imprimir prototipos, sería considerablemente más difícil para los estudiantes identificar los puntos débiles de sus diseños y mejorarlos. Los estudiantes son ahora capaces de relacionar su aprendizaje en el aula con las aplicaciones prácticas en la industria, un vínculo que de otro modo podría ser difícil de comprender.